El Business Intelligence aporta a las empresas europeas más flexibilidad y escalabilidad que a las empresas de otros países.
Las implantaciones europeas de BI en la nube están mucho más impulsadas por la flexibilidad y la escalabilidad que las norteamericanas, que se centran más en el coste y la velocidad de implantación. En cuanto a los beneficios reales, las empresas europeas encuentran mayores ventajas en la externalización del hardware y en la reducción de los costes de administración, mientras que las norteamericanas se benefician más de la escalabilidad y la velocidad de despliegue.
Tanto Norteamérica como Europa citan los problemas de seguridad y legales como sus principales retos, pero los europeos lo hacen en un grado mucho mayor. Esto se debe probablemente a las leyes de privacidad más estrictas de Europa.
Las estrategias del Business Intelligence
Los teóricos en Business Intelligence la definen como: “un conjunto de estrategias, aplicaciones, datos, productos, tecnologías y arquitectura técnicas, los cuales están enfocados a la administración y creación de conocimiento sobre el medio, a través del análisis de los datos existentes en una organización o empresa”.
Se trata de una tecnología que nos permite analizar grandes volúmenes de datos (Big Data) que resultan casi inmanejables si no disponemos de nuestro lado de una solución estas características.
El Business Intelligence permite analizar el gran volumen de datos que genera una empresa (Big Data) y convertirlo en conocimiento que ayuda a la toma de decisiones, así como anticipar escenario futuros y poder impactar en mejores resultados empresariales.
Desafortunadamente, son pocas las empresas que analizan los datos que generan y esto es una oportunidad perdida para poder mejorar su negocio. Por ejemplo, para una empresa que cuenta con trabajadores móviles y vehículos puede resultar vital.
“¿Por qué?”, te preguntarás, pues porque con la ayuda de la tecnología de Business Intelligence podrás conocer desde el consumo de combustible de todos tus vehículos, los kilómetros y rutas realizadas, el tiempo del motor en funcionamiento, las paradas realizadas, o los clientes atendidos, entre una extensa serie de parámetros.
Todos estos registros de actividad pueden ayudar a mejorar no sólo la operativa diaria, si no a ayudar a impactar en una mejor productividad, ahorrar costes así como a ayudar a consolidar la competitividad de una empresa.
Para ello, será imprescindible que la solución de BI (Business Intelligence) utilizada presente los datos de una forma sencilla para el cliente final pueda ayudar a la toma de decisiones necesarias para mejorar la actividad de su empresa.