La mayoría de los gobiernos han intentado evitar este tipo de medidas, porque son bastante controvertidas. Finalmente, a la mayoría no le ha quedado otra opción que saltar está barrera de la privacidad.
Estados Unidos se suma al uso de estas medidas. La diferencia de sus medidas con las de otros países, es que no han desarrollado ninguna aplicación, según cuenta el Wall Street Journal harán uso de los datos de ubicación que provienen de los anuncios procedentes de los móviles.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos son los que se encargan de recoger esta información de manera anónima. Con estos datos se quiere crear un portal con los datos de ubicaciones de hasta 500 ciudades del país. El objetivo sería encontrar las zonas donde se reúnen grandes cantidades de personas para tomar medidas.
En el proyecto también están participando universidades como Harvard o Princenton.
Aunque, insisten en que los datos son privados, que solo quieren conocer los puntos donde hay grandes aglomeraciones la polémica no se ha podido evitar. Los expertos saben que estos datos pueden ser muy intrusivos si se saben utilizar, y que los Gobiernos puedan acceder a ellos sin ningún tipo de restricción levanta muchas inquietudes y sospechas.