Los indicadores DESI reflejan que el uso de los datos en las pequeñas y medianas empresas está en el 11%, mientras que la media europea se sitúa por encima del 12%.
La pyme española aún no saca el rendimiento que debería de los datos. Actualmente todo lo que rodea al mundo de la empresa tiene que ver con el uso de información. No obstante, los referencias obtenidas del dossier de indicadores del Índice de Economía y Sociedad Digital (DESI) correspondiente a 2020, con los principales resultados del índice que elabora la Comisión Europea, señalan que España se sitúa por detrás de la media de países europeos en el uso del Big Data.
En concreto, a nivel del uso del Big Data, España se sitúa en el 11%, mientras que la media europea está en el 12%. Algo similar ocurre con la utilización de servicios de cloud computing, donde el salto porcentual es de dos puntos, es decir, España se sitúa en el 16%, mientras que la media nacional en el 18%.
Volumen de negocio inferior
Dicho estudio viene motivado por el auge del ecommerce, cuya expansión comenzó fundamentalmente a raíz de la crisis provocada por la Covid-19. Existen determinados indicadores que demuestran que España no saca todo el rendimiento posible a esto. De hecho, en lo que respecta al propio uso que hacen de la venta online con otros países de la UE, se encuentra un punto porcentual por debajo de la media (7% y 8% respectivamente).
Asimismo, el volumen de negocio que proceden de estas ventas online también es inferior con respecto a la UE. En nuestro país este volumen supone el 9%, mientras que la media de la Unión se sitúa en el 11%.
Respecto a las ventas online, España ocupa la úndecima plaza de los 28 Estados Miembros. Y, si bien su puntuación ha mejorado este último ejercicio (57,5) con respecto al año pasado (53,6), su posición empeora, ya que utilizando los parámetros de este año, en 2018 y 2019 hubiese ocupado la décima plaza.