El Big Data se ha aliado con la Agencia Tributaria y ya está ayudando al organismo oficial a detectar a aquellas personas con patrimonios muy solventes que dicen vivir fuera de España.

¿Alguna vez has mentido a la Agencia Tributaria? Si lo has hecho o lo has intentado, debería saber que Hacienda está intensificando el uso de la tecnología para cazar ese tipo de mentiras. Concretamente, está empleando el Big Data para investigar a los ricos que dicen vivir fuera de España.

Fuentes de la Agencia Tributaria han informado que ya tienen bajo sospecha a más de un centenar de contribuyentes que tienen patrimonios relevantes. Para ello están empleando el big data con el fin de poder determinar qué información es cierta y cuál no. Y es que si dichos contribuyentes están residiendo en España, tendrían pagar impuestos en el país.

Control tributario

La Agencia Tributaria ha publicado también los resultados del control tributario relativos al ejercicio de 2020 en los que indica que están investigando el origen de dichas fortunas.

Este nuevo instrumento de control del contribuyente forma parte del Plan Anual de Control Tributario y Aduanero 2021, publicado en febrero en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Como ya avanzamos, en dicho documento, la Agencia Tributaria pone de manifiesto que utilizará el Big Data y la analítica de datos para  conocer de una forma ágil y eficiente los indicios de residencia de los ciudadanos.

Con esa información, Hacienda podrá controlar a los ciudadanos deslocalizados que dispongan de un nivel relevante de patrimonio o de renta. Además, según indica la Agencia, este colectivo de contribuyentes tiene más capacidad de hacer uso de técnicas complejas de ingeniería fiscal para ocultar sus patrimonios, lo que requiere “el uso de mecanismos de análisis sofisticado para investigar y comprender complejos entramados financieros y societarios”.

Hay que recordar que hace meses el famoso youtuber El Rubius anunció que se mudaba a Andorra para evitar pagar tantos impuestos en España. Como él, son miles los contribuyentes con altos patrimonios que han mudado de residencia fiscal.