En colaboración con Forvis Mazars, el Instituto AI for Sustainability de ESSCA presenta los resultados de su primer barómetro sobre la integración de la Inteligencia Artificial en las empresas europeas y su impacto en la sostenibilidad.
Este estudio, basado en las respuestas de 400 responsables de TI en Europa, explora el uso y la gestión de la IA, las cuestiones de sostenibilidad, las consideraciones éticas y las perspectivas de futuro.
Según datos de este Barómetro IA de ESSCA, un 39% de las empresas europeas no tiene previsto ofrecer formación en IA a sus empleados. Además, un 14% de las empresas no tiene planeado invertir en IA y un 6% de estas nunca ha invertido en esta tecnología.
Pese a la gran importancia que está adquiriendo la IA en todos los ámbitos de la sociedad, destaca como un factor importante el hecho de que muchas empresas todavía no consideran a esta tecnología como prioritaria en relación a la formación de sus empleados y a la inversión.
Experimentación y aprendizaje en IA
Dejan Glavas, profesor en Finanzas y Director del Instituto IA para la sostenibilidad de ESSCA explica que “el estudio muestra que las empresas aún no tienen empleados dedicados a gestionar los riesgos éticos de la IA, y que la experimentación y el aprendizaje organizativo son esenciales para un buen dominio de esta tecnología. Muchas empresas no solo están utilizando IA desarrollada por terceros, sino que también están creando su propia IA o mejorando sus sistemas existentes, lo que lleva a una mayor necesidad de talento, no solo en competencias técnicas de IA, sino también en las áreas de gobernanza de datos y gestión de la IA”.
Añade que “las generaciones más jóvenes son las más positivas sobre el futuro impacto de la Inteligencia Artificial en su sector, pero también se muestran más cautelosas sobre la necesidad de reciclaje y mejora de competencias durante la próxima década”.
Esta ausencia de formación e inversión hace que las empresas se sientan todavía inseguras en su uso. Los datos más destacados de este primer Barómetro IA de ESSCA muestran que sólo el 26% de las empresas europeas se consideran bien preparadas para gestionar las perturbaciones y los riesgos asociados al uso de esta tecnología. Además, un 22% de las empresas se ha encontrado con problemas importantes a la hora de implantarla, principalmente debido a limitaciones financieras y estratégicas, integración de TI y escasez de personal.
Glavas concluye comentando que “en este estudio se han puesto sobre la mesa las carencias de las empresas europeas en relación al uso e implementación de esta tecnología, pero la situación es reversible y mejorable ya que hay un consenso mayoritario sobre los beneficios de invertir en ella, sobre todo en términos de mejora de la productividad y reducción de los costes empresariales”.