El Big Data se ha convertido en una herramienta imprescindible para la recuperación de las empresas en la era post-pandemia.
Actualmente es más fácil sacar mejores conclusiones a partir de los datos y también tiene un coste mucho menor que a principios del año pasado. Lo afirma la consultora Prenomics, especializada en analítica de datos aplicada a negocio, que asegura que la pandemia ha repercutido positivamente en la transformación digital de las empresas.
Ahora las compañías pueden sacar mucho más valor a los proyectos centrados en datos. Esto se debe principalmente a tres razones: «Primero, a que existen más datos debido al incremento de la actividad online; segundo, a que en el último año las empresas han invertido en tecnologías de uso corporativo que han facilitado el acceso, uso y análisis de los datos; y, tercero, a que la población se ha acostumbrado al uso de nuevas herramientas digitales, cosa que ha reducido la resistencia al cambio dentro de las organizaciones», explica Roger Agustín, CEO y co-fundador de Prenomics.
Ser empresa data-driven
Para dar los primeros pasos para convertirse en empresa data-driven, Prenomics recomienda explorar cómo construir una buena base informacional que permita automatizar y hacer accesibles los datos con herramientas optimizadas para el análisis, para ganar eficiencia interna.
En cambio, en empresas con un elevado grado de desarrollo analítico, es más eficiente llevar a cabo proyectos con impacto directo en la cuenta de explotación. «Cada sector tiene sus particularidades, pero, ahora mismo y de forma transversal, es muy interesante desarrollar proyectos en el ámbito de la activación de clientes «dormidos», de establecer precios dinámicos en función de la oferta disponible y de la optimización del aprovisionamiento», según Agustín.
«Incorporar Business Intelligence a la estrategia de negocio dota de significado los datos en bruto que recoge la empresa y los convierte en información relevante y con valor añadido. Esto permite responder a preguntas clave de negocio y extraer conocimientos valiosos aplicables directamente en la dirección y en la gestión de toda la empresa, con un impacto directo en los resultados de la compañía», concluye Agustín.