La situación se debe a factores medioambientales y podría solucionarse a principio del próximo año, según los análisis predictivos realizados desde la UE.

Los problemas de suministro energético en China, podrían prolongarse hasta el 2022, según los pronósticos de la Cámara de Comercio de la Unión Europea en el país asiático. Asimismo el alargamiento de esta escasez energética ha tenido como consecuencia las medidas de racionamiento en importantes polos del país.

La situación ha sido definida por el presidente de la institución, Jörg Wuttke como»desalentadora». Wuttke ha recordado que debido a esta escasez de energía,se han provocado apagones en zonas residenciales de algunas regiones nororientales del país. La Cámara de la UE se mantiene en contacto con el Gobierno chino, que, según Wuttke, «verdaderamente está intentando garantizar que las cadenas de suministro se mantengan estables».

Costes económicos

Por su parte el representante de las empresas europeas ha explicado que esta situación se debe a factores ambientales como las inundaciones. Un ejemplo de ello son las anegaciones que han obligado a cerrar minas hulleras en importantes zonas productoras de carbón. El representante ha hecho hincapié en que otras medidas «autoinfligidas» como los límites gubernamentales a la fluctuación de los precios eléctricos también han supuesto la situación de escasez actual.

Con respecto a los costes económicos que esta situación supondrá para las firmas afectadas no se puede saber con seguridad, ya que la Cámara no cuenta con mecanismos que permitan realizar un seguimiento diario de la situación de las empresas que la componen.

Entre las medidas que se están llevando a cabo para evitar la escasez energética destaca que las autoridades han ampliado el margen del precio de factura de la luz generada con carbón, mientras que la han eliminado en el caso de las empresas que más la consumen. Esta norma se centra en la energía derivada del carbón que es la que genera el 70% de la electricidad consumida del país asiático.